La Plataforma 'No a la Contaminació' ha asegurado
este lunes que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ya detectó en 2011
"numerosos" episodios de vertidos en la planta de residuos de Reyval,
según ha indicado que consta en el informe que este organismo redactó en mayo
de ese año, poco antes de la concesión de la Autorización Ambiental Intregada
(AAI).
Así, la CHJ advertía a la Dirección General de
Calidad Ambiental del "riesgo" que suponía conceder la AAI a la
empresa Reyval, "dados los antecedentes de infracciones en los
vertidos", condicionando la concesión de la autorización a la realización
de los tres piezómetros "para llevar un adecuado control" y pedía
"que por parte de esa Conselleria -Medio Ambiente- se extremen los
sistemas de vigilancia", según ha informado este colectivo ciudadano en un
comunicado.
De acuerdo con la plataforma, las conclusiones del
informe "no pueden ser más clarificadoras a la hora de establecer
responsabilidades en cuanto a la contaminación de las aguas subterráneas de los
piezómetros analizados". En el informe se señala que lo expuesto "es
una larga historia de episodios de contaminación" denunciados por Seprona,
por la CHJ y por el Ayuntamiento de l'Alcora "que han dado lugar a
actuaciones sancionadoras" de la Conselleria de Medio Ambiente,
"además de una serie de informes sobre documentos técnicos parciales que
no se ajustan a la realidad existente en la instalación".
Vertido "más significativo"
El vertido "más significativo", según No
a la Contaminació, es el detectado el 15 de febrero de 2011, en el que se
midieron niveles de plomo y selenio "muy parecidos" a los detectados
ahora en las analíticas de los piezómetros realizados en junio de 2012, además
de niveles de boro, cinc, níquel "muy por encima" de la normativa
vigente en aquel momento.
Al respecto, ha señalado que la "mayoría"
de los residuos gestionados por la mercantil "provienen de la industria
azulejera y esmaltera, por lo que la mayoría de los posibles vertidos al
subsuelo por parte de Reyval serán de estos residuos, con plomo y selenio,
además de otros compuestos como el boro o zinc, característicos de la
composición química de muchos esmaltes y pigmentos cerámicos, cuyos residuos
peligrosos se han gestionado desde hace 20 años en la planta de Reyval".
Denuncia ante fiscalía
El colectivo ha criticado que los hechos
"señalan a la empresa Reyval como presunta responsable de la contaminación
de las aguas subterráneas detectadas en sus piezómetros", por lo que la
Plataforma presentó el 12 de diciembre pasado denuncia en la Fiscalía, en la
que solicitó que se investigaran "las responsabilidades penales en este
posible delito ambiental que puede afectar la calidad de las aguas
subterráneas".
'No a la Contaminación' ha destacado que el informe
de la CHJ de 20 de mayo de 2011, --donde se incluye una valoración de los
vertidos a dominio público "y de otros que de manera repetida se han ido
produciendo a lo largo de los años de gestión de residuos de la empresa
Reyval"--, "es claro y contundente respecto a la parte de
responsabilidad en los niveles de metales pesados en los piezómetros detectados
en la analítica". El colectivo ha recalcado que la Justicia "debe
determinar si esa responsabilidad es penal y merece castigo".
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